martes, 13 de octubre de 2009

Argumento de la obra

"El Señor Galíndez”, escrita en 1973 por Eduardo Pavlovsky, refleja la imagen del torturador inmerso en la normalidad de lo cotidiano. Es una obra que plantea a la tortura no como patología individual sino como producción de subjetividad institucional. Una tortura diaria, cotidiana, interiorizada como conducta normal, aceptada y valorada.
“Si insistimos en los cuadros psiquiátricos individuales de los torturadores perdemos de vista el eje central de la problemática: la tortura como institución”, destacó Pavlovsky.
En el Señor Galíndez, los personajes se detallan desde lo físico hasta lo psicológico. En el escenario, Beto y Pepe no se convierten en dos monstruos, sino en seres simplemente cotidianos. Como ejecutores profesionales de la tortura también pueden ser buenos padres, sentir inseguridad respecto a su “profesión” y temer los relevos que pueden producirse en lo alto sin que ellos se enteren.
En Beto, Pepe y Eduardo –el joven que manda el Sr. Galíndez para que aprenda el “oficio”- uno puede recorrer el intrincado y complejo mundo de los afectos de personas que han quebrado su ética, precisamente confrontándola con su reverso estético.
A estos personajes se les suman Sara, una mujer de unos 65 años de personalidad con rasgos singulares y las prostitutas Coca y Negra.
Las órdenes las reciben siempre por teléfono del mentado “Sr. Galíndez” pero no saben quién es y por eso el recelo cuando su voz les parece más aguda, o más ronca.
La obra ofrece sucesos que pueden sernos cercanos pero a la vez denuncian un estado de intolerancia violenta que no nos es privativo debido a que recorre y perturba el orden “civilizado” en donde los castigos y las torturas se han impuesto y se hallan a cargo de auténticos profesionales: “la nación toda ya sabe de nuestra profesión. También lo saben nuestros enemigos. Saben que nuestra labor creadora y científica es una trinchera. Y así cada cual desde la suya debe luchar en esta guerra definitiva contra lo que intenta, bajo ideologías exóticas destruir nuestro estilo de vida, nuestro ser nacional”.
En “El Sr. Galíndez” se trabaja la estética de los represores presentándolos más ambiguos y complejos de lo que imaginamos.

2 comentarios:

  1. Alguien que me ayude diciéndome en que movimiento literario se encuentra Pavlovsky en esta obra y el y el tipo textual por favor...

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